Celiaquía

La enteropatía sensible al gluten o más conocido como celiaquía es una inflamación de la mucosa del intestino delgado como consecuencia de una intolerancia inmunológica a aquellos cereales que contienen gluten.

Esta enfermedad, afecta tanto a niños como adultos, siendo especialmente la incidencia en mujeres, sector que representa más de la mitad de la población afectada.

La Federación de Asociaciones de Celiacos en España (FACE), estima que alrededor de un 1% de la población padece esta enfermedad.

Causas

La enfermedad celiaca es el resultado de tres procesos que dañan la mucosa intestinal; la predisposición genética, el sistema inmunológico del individuo y los factores ambientales

El gluten es una proteína que tiene cuatro componentes proteicos, (gliadinas, gluteninas, albúminas y globulinas), siendo las dos primeras las más abundantes.

Síntomas

Los síntomas pueden ser muy variados, siendo los más comunes la pérdida de apetito (y como consecuencia, de peso), fatiga, vómitos, diarrea, pérdida de masa muscular, anemia o incluso retraso del crecimiento.

Anímicamente, la persona afectada está irascible, triste, o puede entrar en periodos de introversión.

Se ha observado que el factor de la edad si bien no es determinante, pero se pueden agrupar síntomas dependiendo del grupo de edad en el que se encuentre el individuo. Así tenemos que durante la infancia puede causar pelo frágil, vómitos, hipotrofia muscular, anorexia, retraso del crecimiento o leucopenia. Durante la adolescencia, puede causar hepatitis, cefaleas, dermatitis y artritis crónica entre otras. Ya en la edad adulta, puede aparecer menopausia precoz, abortos, infertilidad, astenia o incluso cáncer digestivo.

Prevención

Lamentablemente, no existe un tratamiento como tal para dejar de ser celiaco. La única herramienta que existe es la prevención basada en seguir una dieta en alimentos naturales y evitando el consumo de alimentos procesados (que generalmente llevan cereales, harinas o gluten). 

Esto entraña problemas en cuanto a poder tener reuniones sociales o incluso llenar la nevera. Los alimentos sin gluten se han popularizado y sus precios se han vuelto más asequibles, pero, aun así, sigue habiendo diferencias de precios entre unos productos y otros.

¿Qué comer y qué no? 

La normativa referente al etiquetado, obliga al productor a destacar si el alimento contiene gluten o alguno de los cereales que lo contienen de modo natural. A pesar de la normativa, siempre es recomendable andar con ojo frente a posibles errores.

Los cereales que contienen gluten son el trigo, la cebada, el centeno, la avena, el kamut, la espelta y variedad híbridas y productos derivados de estos cereales como las harinas, los almidones, las féculas o las sémolas.

Entre los cereales que no contienen gluten, podemos encontrar una gran variedad como el trigo sarraceno, mijo, amaranto, maíz, arroz, quinoa…

Importancia

El impacto de esta enfermedad en la sociedad ha sido tanto que hasta se ha creado el Día Nacional del Celiaco, el 27 de mayo, aunque a nivel internacional se celebra el 5 de mayo.

Es por ello que se insiste a los hosteleros en que tengan en cuenta la composición de los alimentos tanto en sus cartas como en la operativa dentro de la cocina.